Y PORQUE SE PICAN

La aparición del Grupo RESISTENCIA Y DIGNIDAD REVOLUCIONARIA ha empezado a generar algunas ronchas en varios sectores. Parece que como que creían que tenían todo controlado, todo arregladito y podían seguir llevando a cabo sus cálculos y planes, unos de poder político, otros del sindical y hasta están los de los negocios y les ha molestado muchísimo nuestra presencia, nuestra aparición como Grupo diferenciado de lo existente.

A algunos de los integrantes del grupo han comenzado a atacarlos con panfletos anónimos que además de provocarnos algo de risas por las burlas entre nosotros mismos, nos indica que empezamos bien. Descalificaciones e insultos muy poco creativos u originales como “decrepito”, “vende obreros”, “pelele”, “muerto de hambre” y hasta “sucio” se han usado en contra de algunos de nuestros integrantes y en su desespero por vernos actuando y el temor a las simpatías y apoyo que podamos lograr, hasta le exigen a las autoridades de la empresa que nos despida o jubile, así, a lo arrecho. 

Entendemos que a algunos compañeros de la estructura del sindicato nos les haya gustado y usen en privado calificativos contra nosotros como “traidores”, “brinca talanqueras”, también porque nuestras ideas hayan empezado a circular en Planta Centro recurran a traer a alguno de los ex dirigentes sindicales jubilados de esa planta para que los apoye. Entendemos que a los grupos gerenciales o individuos arribistas y trepadores de cargos y también a algunos aspirantes a hacer los negocitos de siempre se le hayan alborotado las hemorroides y por supuesto entendemos mucho mas que algún grupo que ya tenían listos los planes y cálculos para cuando vengan las elecciones sindicales, ahora les haya asaltado el pánico de la duda de que haremos para las elecciones sindicales y que apoyo tendremos entre los trabajadores. Pero porque se preocupan tanto entonces, porque “gastan pólvora en zamuro”, si somos todo eso que todos ellos dicen en los pasillos y en los panfletos anónimos contra nosotros, no tendrían por qué estar preocupados ni ocuparse de nosotros, pues los compañeros trabajadores simplemente nos ignoraran y rechazaran.